jueves

PunTo dE ReferEnciA (Cuentos MicroCortos)


No quiero morirme, pero me estoy matando con el pulgar en el cuello, acuerdate de como soy, ¿cuando me verè en el espejo?. Sí me perdí al momento de caminar, la decición fué tomada por el PODER, yo solo volteaba para ver el camino recorrido que se desvanecia a cada paso dado. De pronto me ví envuelto en un ocèano, esté se torno oscuro y me ahogò en la incertumbre de la multiplicidad, camine y volé entre el agua, como puede hasta la orilla llegue. Tomé de la mano a mí destino, me ayudo a pararme, me sacudio de la arena que se me había pegado en mí mejilla, pidío ayuda a mís sueños para que me trajera algo satisfaciones. Se me hizo una sonrisa y un suspiro. Caminaremos hasta aquella pequeña vereda -me dijo. Que lindo paisaje le dije a mí guía el destino. A cada paso con èl, me sentìa seguro, nada podría pasar mal, ví aves sobrevolar el lugar, pero eran solo sombras sin cuerpo solo el sonido de su aleteo pausado y discontinuo. el calor de sol me sofocaba, no podía distinguir entre el calor de mí respiración y del ambiente; las cucarachas salian de su escondite para agruparse y hacer suyo un arbol limonar que trepaban veloces y vibrantes, con su cuerpo cafe obscuro llenaron en totalidad sus ramas, hojas, frutos, las flores eran sus cabezas de color amarillo que se derretian con el sol. Pulgas pasaban brincando a mí lado, a cada brinco cambiaban de color: morado, amarillo, plateado, azul metálico. Eran milles, pasaban entre mís piernas, por mí cabeza, a lado de destino. Varias en el aire se incediabán por efecto de los rayos solares, por eso su brincar era rapido y seguro. Se dirigian a un perro blanco que me observaba desde lo alto de un montículo de piedras grises de 2 metros de altura . Sus patas traseras dobladas de lado izquierdo, las delanteras ergidas en posición de guardían. Ví sus ojos y me parecio conocido. Aulló con una fuerza tal que atrajo un recuerdo infantil. Era mí perro, mi amigo, el sustituto de mi padre en los dias de mi nueva conocida soledad. Las novedades del mundo se las platicaba a ese perro que antes de morír era negro. Destino trono sus dedos y lo llamo Grisly, las pulgas se adentrarón en su cuerpo, he hicierón un objeto luminecente que cambiaba de color a cada parpadear del perro. Las pulgas se sincronizarón uniformemente pasaban del marrón al verde, y del anaranjado al rojo sangre. .... continuara.....

1 comentario:

Ticitl dijo...

Un buen viaje, no me convenció como se apareció el árbol y luego el perro... me falta algo que hile todo eso...
residuos de tu vida pasada...